viernes, 27 de noviembre de 2015

ALGO DE LAS SENDAS DE LOS RISHIS



Seguir la senda del Rishi, una clase especial de hombres dedicados a través del silencio y su descubrimiento de la unificación de todo, aquello que los científicos teóricos se han esforzado (Einstein a la cabeza), en demostrar más allá de sus modelos y ecuaciones, no es tarea sencilla para un ser común, de diferente cultura, aunque eso sí, abierto a todo aquello que puede ingresar a su mente por el lado que sea.
Los rishis descubrieron que efectivamente hay un pasaje entre dos mundos. Uno de ellos es el que está construido en base a los conceptos, ideas, razonamientos y todas las propiedades atribuidas al cerebro. El otro mundo, es el llamado de "la inteligencia silenciosa". Un mundo donde se cumplirían los deseos insatisfechos de Einstein, de su campo unificado, cuando sostenía que debía haber un "fondo" en el que  los "aparentemente pares de opuestos": tiempo/espacio/materia/energía" se fusionaran. Un espacio donde las transformaciones de éstos fuera posible. Ese mundo de los rishis, el de la naturaleza "fusionada" es el que se haya del otro lado, cuando se ha cruzado la senda.
Al decir de Chopra, "Einstein estaba convencido (intuitivamente) de esta posibilidad" y que pudiera llevarse a cabo solamente a través de "la demolición del mundo de los sentidos".
Trabajó Einstein en una teoría que implicaba un universo conteniendo todas esas fuerzas en solo un "compartimiento" y no los cuatro que habitualmente se han manejado.
El término "unificar" significa poder demostrar que dos cosas que "parecen" totalmente diferentes, pueden transformarse una en la otra y que sucedería en un nivel de considerable profundidad en la naturaleza. 
En este mundo de pensamiento racional y muchos años después de la muerte de Einstein, se ha propuesto "la teoría de las supercuerdas" que podría haber resuelto el tema.
Miles de años atrás los rishis, habían empezado a considerar la "unificación" de la naturaleza. Dejaron por escrito en textos como el "Rig Veda" su profunda penetración en ese otro mundo, el profundo nivel de la naturaleza".
Hay una frase que expone: "Un rishi ha penetrado tan profundamente en la naturaleza de las cosas que aún Dios se sienta a sus pies para aprender" como se ve en "La lección del Yoga Vasishtha cuando Rama, una encarnación divina, le ruega al sabio Vasishtha que lo instruya".
Los rishis decidieron atravesar la zona de las duplas tiempo-espacio, materia-energía, girando su conciencia. "Cambio que tiene profundas consecuencias y que equivale a "voltear" al revés el mundo objetivo".
En principio, el tradicional enfoque de "despierto/dormido/soñando, como experimentamos habitualmente fue analizado por los rishis y detectaron un espacio entre el "despierto/dormido". Por ese espacio, fueron capaces de contemplar otro estado de conciencia, donde no está simplemente la llamada "realidad" así como la experimentamos. Este "cuarto estado" está regido por leyes diferentes a las del sueño convencional y a los de la vigilia ordinaria.
Lo más notable fue que han podido "observar" que en ese "sendero"entre los estados descritos, suceden cosas tales como la transformación de una realidad en otra. Ese espacio estaría "situado" por decirlo así en el momento, en el "tiempo" en que la mente abandona a la vigilia y antes de quedarse completamente dormida. En principio, este espacio entre ambos estados, se denominó Yoga (sánscrito: unión).
Los rishis postularon que este "campo unificado" forma parte del mundo real, siendo producto de la experiencia y no solo una "construcción mental, teórica" como los son las propuestas actuales, hasta donde se sepa.
Rishi es por tanto, aquel que ha aprendido a trascender los tres estados conocidos. No está en trance, su estado es vigil, pero diferente a la vigilia convencional.  
La otra senda de acceder al "área silenciosa" sin tiempo, sin espacio es a través de la meditación que realizaron los  rishis.
Observaron que el mismo tipo de intersticio que existe entre la vigilia y el dormir, se produce entre pensamiento y pensamiento. Por allí también accedieron al fondo silencioso. Este acceso entre dos pensamientos tiene un sentido hacia otra profundidad, hacia un instante breve sin nada que se interponga, logrando una notable expansión de nuestra conciencia. 
A través de esta "conciencia ampliada", los rishis afirmaron que nos sería posible acceder a dimensiones extraviadas, campos energéticos invisibles a nuestros sentidos convencionales. En resumen a todo cuanto los físicos teóricos han planteado. 
Nuestro universo, el que podemos percibir, sería apenas una parte minúscula y muy reducida de lo original.
Al parecer, y sólo por ahora, nuestro cerebro se habría "conformado" con cumplir una cierta parte de aquello para lo que ha recibido entrenamiento, como si eso fuera su programación al completo; pero, también podría ser que al principio, hubiera habido más "contacto" con la pura conciencia, con lo trascendente, aprendiendo a sumergirse en las sendas. Tal vez, podríamos percibir realidades diferentes.